El primer domingo de Festival suele ser uno de los días fuertes del Festival tanto por cantidad de público, suele venir mucha gente desde Barcelona pasar el día, como por eventos de promoción y en este año no ha sido una excepción, dentro de las limitaciones por las restricciones de público y posibilidad de traer invitados internacionales.
Empezamos el día con la sesión despertador con uno de los títulos que más expectación había levantado antes del inicio del Festival, Lamb. La película es un drama con un elemento fantástico, en el que vemos el día a día de la pareja, sus quehaceres, su trabajo, su relación como pareja y los cuidados de su nueva hija de manera que vemos como se adaptan a escenas cotidianas que en un principio chocan pasan a ser algo normal (cuando no lo son) y el espectador sentirá la misma sensación siendo para este incluso entrañables. Aunque no se nombra, el espectador deduce que en el pasado la pareja tuvo algún problema con hijo o el no poder tenerlo con lo que la recién llegada traerá momentos de alegría y cambiara a la pareja. La película tiene un guion que es muy original extraordinario como también lo son las actuaciones en las que hasta los diversos animales de la granja parecen actuar con expresividad y con miradas a cámara o su comportamiento, pero especialmente la protagonista Noomi esta espectacular. Lo chocante y raro de alguno de las acciones causan un punto de comedia que es un contrapunto perfecto al tono general de la película. Por si esto fuese poco, la guinda es el final más sorprendente y raruno en tiempo. Una película con la que me ha gustado mucho, una digna ganadora del Festival.
A continuación asistimos a la proyección por el aniversario de El Dia de la Bestia. Una película que sigo disfrutando y más en una pantalla y sonido como el del Auditori. Al finalizar la película Alex de la Iglesia nos cuenta secretos del rodaje de la película. una gran experiencia.
Después es el turno de varios Photocalls en el Jardin del Melia, donde podemos ver Roque Baños (ganador del Premio Maria Honorifica) a Noomi Rapace, los actores de la serie Historias para no dormir o Paraiso
Después de un merecido descanso empezamos la tarde en Tramuntana con la proyección de El Paramo opera prima de David Casademunt producida por Netflix. El director nos presenta la película y nos dice que como aficionado al cine Fantástico y asiduo como público al Festival, esta cumpliendo un sueño. Una película de terror con una buena historia, una gran ambientación y unos actores que consiguen crear una atmosfera de tensión que te clava en el asiento. Algunas de las secuencias son de pelos de punta y todo en un único escenario y apenas dos protagonistas. Un gran debut
Al salir en los pasillos del Melia me encuentro una gran sorpresa, ya que me encuentro al director Mamoru Hosoda (Premio Honorifico de esta edición) entado haciendo ilustraciones para los aficionados. Un detallazo a la altura de su talento.
Y par acabar el día nos vamos al Prado para ver la que eta anunciada como la película más violenta y sangrienta del Festival, The Sadness y efectivamente lo es. Un virus hace que las personas se conviertan en una especie de zombies violentos y sedientos de sexo. Festín gore con desmembramientos, amputaciones, cabezas reventadas, sexo bruto y depravado que arranca los aplausos del público. En su tramo final suelta un poco el pie del acelerador pero el global es puro diversión para el fan.
Y así de contentos acaba una jornada maratoniana y cansada, pero que ha merecido mucho la pena